Verdades demasiado obvias de las cuales las personas deberían estar hablando pero no lo están haciendo porque los tabúes sociales los tacharán de pervertidos: Mitos en el hentai y la sexología del orgasmo masculino.

Hoy, en el primer capítulo de la nueva serie «verdades demasiado obvias de las cuales las personas deberían estar hablando pero no lo están haciendo porque los tabúes sociales los tacharán de pervertidos», hablaremos de un tema que hace rato ya debimos haber tomado por donde quema.

¿Por qué las personas que dibujan y animan porno de caricaturas chinas hacen que las monas griten de placer cuando el vato se viene dentro?, o sea, hay casos (súper utópicos) en los que se vienen al mismo tiempo, esto es una mentira, ¿cuál es el porcentaje de que una pareja que tiene relaciones sexuales se venga al mismo tiempo?, no lo sé, pero es muy baja, de hecho podría apostar a que si fuese de un 100%, la cantidad de divorcios disminuiría de forma considerable.

Aquí no queda otra que hablar con la verdad, los que más cagan esto es el género masculino, independiente del tamaño del miembro, lo cierto es que la zona más erógena de la mujer es el clítoris y la combinación de este con otros sectores de altas concentraciones nerviosas en el cuerpo, no le cuesta a nadie tomar un libro de anatomía y buscarlos, o bien, preguntar a la pareja por aquello que le gusta. Por ejemplo, yo tenía una ex que se podía venir si le acariciabas la espalda, lo cual hacía nuestras relaciones un tanto extrañas porque tenía que metérsela al mismo tiempo que le acariciaba la espalda, te sientes como si te estuvieras cogiendo a tu mascota, un gato o un perrito, pero bueno, de la historia de esta chica ya les hablaré en otra emisión.

El problema es que los vatos se vienen bien rápido, esto es natural, de hecho hay formas de entrenar al cuerpo para aguantar más de los cinco miserables minutos, por ejemplo te puedes colgar una toalla en la verga y jugar a levantarla, esto entrena los músculos que son los encargados de la eyaculación. A las embarazadas estos músculos se le joden tanto que después del parto que hay entrenamientos especiales para evitar que los mismos provoquen incontinencia urinaria, si quieres puedes buscar y ponerte a practicar, búscalos como «ejercicios de Kegel», su función es el de fortalecer el suelo pélvico. Y no es broma, si te avientas el entrenamiento de la toalla por un mes y luego te la jalas vas a venirte de una forma mucho más intensa (además de tardar una puta eternidad en venirte), pero total, dejemos de lado el tema porque tampoco quiero que esto sea una Disneylandia para los degenerados.

No soy un experto en sexología (por ahora) y no quiero pervertir a todos los que me leen, pero pues la ciencia nos otorga un poco de ventaja a los que nos hemos aventurado en sus hojas, incluso en lo sexual. No está demás dar uno que otro consejo a los pobres ciudadanos que andan allí desarmados viniéndose a los cinco minutos.

Ahora, el hecho de que un hombre se venga rápido se remonta a la historia, otrora muchos hombres fornicaban con una sola mujer, como los perros, esto porque aumentaba la probabilidad de que esta última quedara preñada, o sea, la competencia del esperma ya no se remontaba a los espermatozoides que provenían de un solo hombre, sino que incluso contra el esperma de otros, de hecho la forma del glande de “escoba” servía para barrer durante la penetración el esperma que dejaron otros hombres durante el acto sexual. En la actualidad esa utilidad está en desuso, a menos que estés en alguna orgía donde los escrúpulos y el pudor brillan por su ausencia (no juzgo).

Esta dinámica sexual hizo que los hombres se vinieran rápido para poder fornicar con muchas mujeres, y claro, el orgasmo de la mujer se prolongó demasiado para poder sostener relaciones sexuales con tantos machos haya en la redonda, pues claro, al final del día a nadie le gusta coger si no está excitado.

Dado que poseemos esta diferencia biológica, es obvio que es muy difícil que ambos se vengan al mismo tiempo, no solo en las caricaturas chinas, sino en la vida real en general.

Por último, quiero dejar claro el hecho de que la chica grite mucho cuando se vienen dentro, esta es la mayor pendejada, ¿nunca se han venido dentro de una morra?, siempre hay un momento en tu vida sexual de adolescente en el que tu novia te dice que te vengas dentro para ver qué se siente (adolescente porque solo en esa etapa aceptarías esa pendejada sin pensar mucho en las consecuencias). Allí estás tú, babeando y gimiendo y tirándolo todo, te sientes como si le hubieses tirando el volumen de las cataratas del Niágara dentro, te sientes realizado, un macho alfa, la rellenaste como pavo de navidad, la miras a los ojos y ella te dice: ¿ya?

Es allí donde te das cuenta que venirte dentro no cambia nada en la ecuación, no hace que se sienta más chido, no hace que se siente más intenso, no cambia nada, es un mito que las caricaturas chinas y el porno han popularizado, para una mujer es imperceptible esto. De hecho si le sigues bombeando lo único que te van a decir es que se siente más húmedo, pero de allí no pasa, eyacular en los más remotos lugares de la vagina no otorga mayor placer y no hace maravillas. Por si fuera poco ahora eres un adicto del creampie y tu vida sexual de adulto va a ser una frustración (a menos que tengas planeado formar una familia)

Esto nos lleva a la conclusión de que los guionistas (en caso de que los haya) de las caricaturas chinas son unos completos pervertidos que han idealizado en sus cabezas relaciones sexuales que nunca ocurren y nunca ocurrirán.

Desconozco si este género intenta plasmar fantasías, pero seamos honestos, pocas personas pueden obtener excitación de lo que sabemos que no es real, de hecho con menos ganas la obtendremos si somos de las personas que durante un acto sexual no perdemos la razón y estamos constantemente pensando con lógica y basamos nuestros actos en un raciocinio completamente deliberado.

No estoy de acuerdo en que el porno de caricaturas chinas mitifique tanto. Lo de las mujeres escurriendo chorros y demás lo acepto, incluso la fantasía de los tentáculos y demás (a mí no me gusta, pero lo acepto), pero de allí a que nos vayamos a algo tan fumando como venirnos al mismo tiempo… bueno, creo que hay más posibilidad de que unos tentáculos rompan la ventana, secuestren a mi novia y la violen, yup, sin duda alguna es más probable.

En fin, esto es todo de mi parte, espero que se diviertan mucho levantando la toalla con la verga, que supongo que es lo único que se les quedó de este manifiesto, pinches enfermos.