La moda de tener depresión y ansiedad.

Modas pendejas hay muchas, si me pongo a citarlas seguro que no termino ni en una semana. De todas estas modas ninguna me quita el sueño ni me genera problemas, total, cada persona puede hacer con su culo un papalote y echarlo a volar en los impetuosos vientos de las redes sociales.

A pesar de que me mantengo impertérrito en la mayoría, hay una que por más que me esfuerzo no puedo evitar abandonar mi sosiego para esgrimir mi pluma por la desazón que queda en mi cabeza siempre que leo sus estados o pies de fotos: ¿por qué vergas está de moda ser una persona con problemas mentales?

Allá afuera hay mucha gente que en verdad tiene problemas, gente que tiene ansiedad, depresión y estrés, a esas personas no las vemos aquí presumiendo sus ataques de ansiedad, no los vemos presumiendo lo triste que es vivir, a esas personas las vemos en algún titular amarillista que nos anuncia que ya se mataron, tan sencillo como eso.

Vayan y lean el DSM-V y me cuentan qué tantos signos y síntomas de sus amigos «deprimidos» y con «ansiedad» encuentran en el libro, verán que tomarse una foto en calzones no es ansiedad, tomarle una foto a tu cena, un vídeo en el baño del antro y luego venir al otro día a decir que te quieres morir, no es depresión.

En fin, el daño ya está hecho, ahora mi pregunta es: ¿qué quieres ganar?, ¿likes?, ¿afecto?, ¿lástima?, ¿algún trato especial?, no señor, ni lo uno ni lo otro. ¿Por qué deberíamos tratar mejor a una persona de esas condiciones?, mira, es muy fácil en esta vida ir con bandera de pendejo o con bandera de víctima. Las víctimas siempre quieren tener una vida fácil, una vida de comodidades, de lujos, de oportunidades únicas para ellos. Es la ventaja de ser una víctima, una víctima siempre tiene la vida fácil.

No hay nada que me genere más asco que un pusilánime que espera trato especial, respeto o comprensión por parte de la sociedad o grupos de amigos. ¿Esa es tu forma de destacar?, «mírenme, tengo depresión, no puedo vivir ni un día más», ¿así es como deseas ser recordada?, la persona que no pudo porque su cerebro no se lo permitió. Aplausos señores, aplausos por esta sublime forma de hacer gala en el arte de no valer pa’ pura verga.

¿Sabes quiénes sí merecen respeto y admiración?, las personas que sí tienen esto y se levantan todos los días a pesar de sus problemas mentales, a pesar de que la tristeza los aplasta, a pesar de que la ansiedad los asfixia, a pesar de que todas sus acciones solo destruyen todo a su paso y en algunas ocasiones hasta perseguidos son.No hay nada de orgullo y de especial en levantarse solo para decir en Facebook que tienes problemas y que debemos entenderte, eso lo puede hacer cualquier pendejo.

¿Quieres destacar?, haz algo con tu situación, levántate y destaca por tus talentos, ¿estás triste?, haz arte con ello, ¿tienes ansiedad?, haz arte con ello. Busca de una u otra forma el cómo sobrevivir, tal vez ─y solo tal vez─ puedas en verdad merecer el respeto y admiración de las personas que te rodean, el trato especial de aquellos que te conocen y te frecuentan.

El respeto y la admiración se ganan, no se regalan solo porque un día decidiste que era muy cool decirle a tus amigos que tenías depresión solo porque nadie te entiende o porque tu exnovio te mandó a la verga.

¿Querías sentirte especial?, deja te corto el rollo y te recuerdo algo: En una sociedad donde todos aparentan tener problemas mentales, tu depresión y tu ansiedad se han convertido en medianía, por ende vas a recibir el mismo trato que reciben los demás, ¿querías sobresalir?, pues destacarías más siendo normal, digo, en caso de que en verdad tus talentos pequen de ser laxos ─en caso de que no por favor opta por el camino del talento─.

Deje de mamar, póngase a leer, póngase a hacer música, saque una carrera universtiaria, póngase a escribir, a bailar, incluso a hacer tik-toks, lo que sea, porque para ser honesto: lo único que va a recibir de mí y de muchos, es un escupitajo en la cara. Aquí no le abrimos la puerta a testigos de Jehová ni a morritas depresivas que no tienen nada qué aportar al mundo.

¿Quiere atención?, baila por ella pinche mono.