
Me parecen interesantes las manifestaciones de los médicos en contra del aborto, todo esto como apología a la vida y los derechos que tienen los seres humanos en el momento en que se concibe la vida. Más interesante es que use como argumento el juramento hipocrático que hicieron al egresar de su formación profesional. Si analizamos a fondo este último recurso argumental, nos vamos a topar rápido con una contradicción en la lógica que se está utilizando (convención de Ginebra sobre este juramento):
«[…] No permitiré que entre mi deber y mi enfermo vengan a interponerse consideraciones de religión, de nacionalidad, de raza, partido o clase. Tendré absoluto respeto por la vida humana. Aun bajo amenazas, no admitiré utilizar mis conocimientos médicos contra las leyes de la humanidad.»
Aquí la parte clave es como se oponen dos ideas: El respeto por la vida humana y el conocimiento médico en contra de las leyes de la humanidad.
Lo siento mi estimado, pero las leyes de la humanidad son aquellas creadas por la humanidad misma, estas últimas están diciéndote que el aborto es legal, ergo, tu trabajo es practicarlo te guste o no te guste la idea. Más interesante es preguntarse: ¿La definición de «vida» es algo que puede ser regido por las leyes humanas?, eso es algo que nos podría llevar toda una vida contestar, esto por la sencilla razón de que no tenemos una definición de vida, el humano se ha chingado por años por hacerla, la ciencia tiene una concepción biológica-celular, la física tiene una más interesante que abarca los aspectos termodinámicos de la vida, así nos podemos llevar horas y al final no tendremos una respuesta.
De esta contradicción entre leyes, juramentos, aspectos éticos y morales debemos concluir dos cosas muy importantes:
Primero que nada: así como tú tuviste tu derecho de manifestarte a favor del aborto, debes entender que no todos las personas comparten tu postura moral ante esta problemática social. Así como tú crees en tu postura abrazándote de la «lógica» y de lo que de forma ciega crees que está «bien», de esa misma forma un médico está en su derecho de manifestarse y arraigarse con fuerza a sus creencias. Son humanos, tienen sus creencias y fe en sus posturas, debemos respetar y ver cómo el aspecto legal termina por destruirlos o sustituirlos (que eso es algo que ya está pasando). No se celebra que alguien pierda su empleo por defender en lo que cree, se siente pena y se lamenta el hecho de que el estado actual de la sociedad nos orille a despedir profesionales y que las peleas morales de toda la vida terminen arruinando la carrera profesional de gente que invirtió más de una década a sus estudios, las cosas como son. Andar feliz porque los médicos son despedidos es una actitud mezquina y es celebrar algo que a primera instancia jamás se buscó.
Segundo y ya más personal: no sé la razón por la cual a estas alturas del partido alguien desearía estar entre la espada y la pared. En los 80’s y 90’s los médicos fueron la profesión más loada por las masas. Tenían un alto estatus económico y social, este respeto fue algo que se vino heredando desde una época en la que parecía que estar vivo y sano es lo único que importaba, pero no, las cosas han cambiado, hoy la vida individual es una de las cosas más sobrevaloradas que existen, te podrá parecer radical la idea, pero mira a tu alrededor.
Hay profesiones más interesantes y que requieren más cabeza, esas profesiones hoy están luchando para salvar no una o dos vidas, sino a toda la humanidad.
Está la gente de biotecnología luchando día a día en laboratorios en técnicas genéticas en plantas que puedan mitigar la alta demanda de alimentos que sigue en aumento. Gente luchando ante la inminente aparición de las súper infecciones con la creación de nuevos fármacos. Gente en cuántica y materiales buscando como subir ese maldito 15% de eficiencia que tienen los paneles solares. Gente de química buscando procesos limpios, cómo tratar plásticos, limpiar mares y nuevas formas de transformar la materia en productos de valor agregado.
Todo esta escena de la gente matándose por una nimiedad como el aborto ocurre mientras gobiernos y centros de investigación luchan contra la inteligencia artificial que ha llegado para comerse a todos los que no saben nada del tema y declararse como el nuevo enemigo número uno de la humanidad, dejando en segundo lugar al humano mismo (alguien que había estado invicto en toda la historia).
Hoy tu opinión del aborto poco le importa al gobierno, lo que importa hoy es que mañana esa postura será usada en tu contra porque un algoritmo pondrá a tu nuevo presidente gracias a que tu postura y creencias han alimentado a la maquina para decidir el futuro a base de hacerte creer que estás tomando la mejor decisión. Gobiernos siendo espiados al por mayor por las tecnologías de los chinos y en USA las elecciones siendo manipuladas por algoritmos matemáticos de gerrymandering.
Cada vez son más las cosas que pueden acabar con la puta humanidad y cada vez son más las personas que pelean a oscuras para intentar hacer algo al respecto. ¿Y tú?, todo el puto día hablando del aborto, tu metiéndote a medicina para terminar en una profesión que ya ni es bien pagada y que sólo te deja como blanco moral en un tema estúpido, un tema estúpido de los muchos que habrán en los próximos años.
Que triste debe ser levantarse todos los días para hablar de los mismos aburridos temas, no sé qué se sienta, pero debe doler mucho tener una cabeza tan pequeña. ¿O no les duele?, supongo que no, por allí leí alguna vez que es una felicidad muy grata el vivir siendo un completo pendejo.
En fin… Estudien, abran sus cabezas y no sean como los demás, hay cosas más importantes que levantarse todos los días a hablar de las mismas tonterías.